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La rectora de Granada defiende en la ULL el valor de la universidad pública frente a las privadas «de pinta y colorea»

viernes 01 de diciembre de 2017 - 14:04 GMT+0000

Hoy viernes 1 de diciembre el congreso “La Universidad a debate” que acoge la ULL dedicaba su programa al análisis sobre la brecha de género y la proyección de la universidad en el futuro. Este congreso, que hoy se clausura después de tres intensas jornadas de debate, autocrítica y propuestas de mejora, contó  con la ponencia de Pilar Aranda Ramírez, rectora de la Universidad de Granada.

En su charla, en el salón de acto de Ciencias de la Información, destacaba la necesidad de la crítica como herramienta indispensable para la mejora.”Sin la capacidad de crítica y autocrítica no vamos a ningún lado, y es algo que siempre hemos tenido claro. En los últimos años la universidad pública está viviendo una época de desprestigio social, y eso a pesar de que la universidad está ligada al desarrollo económico y cultural de los lugares donde se encuentra. Por eso, no sobra ni una sola universidad pública en España, distinto es que todas ofrezcamos lo mismo y que todo se tenga que estudiar en la universidad”. Sobre el papel de la universidad privada en el marco educativo, la rectora se mostró crítica con la capitalización del conocimiento. “En estos años han proliferado las universidades privadas porque se ha trasmitido que la enseñanza superior es un negocio y no lo es, las hay que solo tienen el objetivo económico y es algo que no me parece sano, las hay que ni siquiera investigan, son de pinta y colorea”.

Aranda también disertó sobre la importancia de formar a ciudadanos sobre todas las cosas. “La universidad pública tiene que formar a profesiones pero antes tiene que formar a ciudadanos críticos, por eso no se puede pensar en la docencia como una carga para el investigador; la primera función de la universidad es la docencia, y eso no puede ser nunca un problema para el profesorado, es una gran responsabilidad, no una carga”. Pero para esto se debe estar en contacto constante con la sociedad. “Evidentemente tenemos que saber qué demandan las empresas, pero ¿es el capital el que tiene que dirigir el proceso educativo?”, se preguntó la ponente. “Nos tenemos que adaptar a lo que la sociedad necesita pero no se debe olvidar la investigación básica”.

Sobre la investigación, la rectora de la Universidad de Granada defendió la necesidad de poner en valor aquélla que se realiza en humanidades. “La investigación en el ámbito social y humanístico es fundamental porque es aquella que puede trasformar la sociedad. Los grandes problemas de nuestra sociedad necesitan de una buena investigación en este ámbito, que se ha mostrado vital para la universidad y que se debe valorar al mismo nivel que la investigación en ciencias exactas”, señaló. “No hagamos una diferencia entre letras y ciencias, hagamos una diferencia entre buena investigación y mala investigación. Tampoco podemos diferenciar la ciencia aplicada de la básica, ambas son fundamentales y necesarias».

El congreso continúa esta tarde con una mesa redonda titulada “La dimensión de género y la complementariedad entre ciencias y humanidades en la transformación de la universidad”, en la que participarán la propia Pilar Aranda, además de Josefina Bueno Alonso, directora general de Universidad, Investigación y Ciencia de la Generalitat Valenciana; María José Guerra Palmero, subdirectora de la Escuela de Doctorado de la ULL; Rosa María Aguilar Chinea, catedrática de Ingeniería de Sistemas y Automática; e Inmaculada Perdomo Reyes como moderadora.


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