El rector de la Universidad de La Laguna, Eduardo Doménech, y el presidente de CajaCanarias, Álvaro Arvelo, suscribieron hoy martes 19 de mayo el convenio marco de colaboración entre las dos instituciones, lo que consolida la estrecha relación entre las entidades, que después de ocho años renuevan su trabajo conjunto por cuatro años más.
El convenio fue suscrito en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, con la presencia del gerente del centro académico, Francisco Calero, y el director general de la entidad financiera, David Cova. Entre los principales objetivos de este documento figuran la puesta a disposición de la comunidad universitaria de productos y servicios financieros, la potenciación de las becas de investigación y la convocatoria de otro tipo de ayudas para los alumnos menos favorecidos económicamente.
Entre las metas que persigue este tercer convenio también aparecen el mayor apoyo a la administración electrónica virtual, el fomento de la capacidad emprendedora del alumnado y la participación de la entidad de ahorros en los proyectos de internacionalización de la Universidad de La Laguna. El acuerdo prevé asimismo la colaboración en jornadas, cursos y seminarios, así como la organización de estudios socioeconómicos que puedan ser de interés para las dos instituciones firmantes.
En opinión del rector, “al margen del acuerdo estrictamente financiero, este convenio pone de relieve todo lo que se ha hecho bien durante este tiempo, y permite abrir nuevos derroteros de actuaciones conjuntas”. Doménech apuntó que estamos hablando “de uno de los convenios más importantes entre universidades españolas y empresas privadas”.
El máximo representante de la institución académica señaló que en virtud de este convenio “muchos jóvenes investigadores son hoy doctores por la Universidad de La Laguna, porque al amparo de este acuerdo han podido realizar su tesis doctoral”. En opinión de Doménech, “este marco de cooperación pone su acento en dos cuestiones básicas para esta institución de educación superior: el apoyo a las políticas de investigación, con un mayor aumento de becas en este convenio que firmamos hoy, y el desarrollo de tecnologías de la información”.
El rector consideró que “estamos ante una entidad que cree en la Universidad de La Laguna, en todo su potencial. Porque además del apoyo a las TIC y a la investigación, la Caja ha previsto un conjunto de becas de apoyo al estudio, que a buen seguro redundarán en el rendimiento y en el futuro académico de nuestros estudiantes.
Por su parte, Álvaro Arvelo tuvo palabras de agradecimiento para los ex rectores Gómez Soliño y Gutiérrez Navarro, quienes también suscribieron este acuerdo con CajaCanarias. “Fruto de tantos años de trabajo conjunto, hoy podemos constatar una sustancial mejora de los procesos de gestión y organización de las actividades académicas y de la prestación de servicios al profesorado, personal no docente y alumnado, mediante la aplicación de los últimos avances tecnológicos”.
Arvelo también destacó que se han facilitado productos y servicios financieros en condiciones preferenciales la comunidad universitaria y a la propia institución académica, creando líneas especiales de financiación para que el alumnado disponga de equipos informáticos y para apoyar a aquellos estudiantes que han apostado por la creación de empresas para su desarrollo profesional.
El presidente de CajaCanarias se detuvo en su intervención para hacer una mención especial a la construcción de los edificios de servicios al alumnado de los campus de Guajara y Anchieta. “El primero de ellos fue inaugurado en enero de 2008, con una sala de estudios de 220 plazas y a sala de informática con cien ordenadores, junto a una oficina. El segundo de ellos se encuentra prácticamente concluido y en breve se procederá a dotarlo con el equipamiento informático y de estudio preciso para uso de estudiantes y profesores, como el edificio anterior”.
En opinión de Arvelo, “no se conoce en España otro caso igual de compromiso de una entidad financiera con una universidad como el de CajaCanarias y la Universidad de La Laguna”. La principal conclusión que se extrae de esta experiencia es, a su juicio, que este convenio “constituye una apuesta de incuestionable valor estratégico, para el posicionamiento de Canarias como una sociedad innovadora, capaz de utilizar su posición geográfica para conectar, dentro de un mundo cada vez más globalizado, Europa, África y América”.
