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Investigadores de la ULL descubren un tratamiento que mejora el rendimiento de la Viagra

jueves 17 de marzo de 2005 - 00:00 GMT+0000

El tratamiento de la disfunción eréctil experimentó una revolución gracias a la aparición de productos inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5 como la célebre Viagra. Sin embargo, uno de cada tres hombres con ese problema no responde a dicho tratamiento. Un grupo de investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de La Laguna integrado por Pedro Gutiérrez, Pablo Hernández y Manuel Mas, ha desarrollado un procedimiento que aumenta la eficacia de la medicación habitual.

Los resultados de este trabajo han sido publicados el pasado febrero en el International Journal of Impotence Research, prestigiosa revista del grupo Nature dedicada a investigaciones de medicina sexual. Este procedimiento consiste en inyectar regularmente a los pacientes sustancias vasodilatadoras como la prostaglandina E1 (PGE1). Los investigadores han constatado que hombres para los que medicamentos como Viagra eran ineficaces, pueden volver a utilizar esa clase de medicación si se someten a este régimen de inyecciones periódicas. De este modo, en dos tercios de los cuarenta casos que se prestaron a las pruebas clínicas, se pasó de un grado severo de la disfunción eréctil a otro leve.

Manuel Mas explica los detalles del hallazgo: «Los inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5, como el sildenafilo o Viagra, tomados cuando se va a realizar el acto sexual son muy eficaces y seguros para aliviar la disfunción eréctil, pero no funcionan en todo el mundo. La alternativa, hasta ahora, era poner una inyección intracavernosa (en el pene) de sustancias vasodilatadoras inmediatamente antes de cada acto sexual. Esta investigación demuestra que, sin necesidad de ponerse una inyección cada vez que se quieran mantener relaciones, en dos tercios de los hombres que no respondían a dosis altas de Viagra (100 mg.), ahora hay respuesta positiva con dosis medias (50 mg.), si se les pone de vez en cuando una inyección «reacondicionadora» de PGE1. Esto puede hacer el tratamiento mucho más cómodo y natural para las personas con este problema».

La investigación está basada en experimentos sobre ratas, realizadas anteriormente por el mismo grupo de investigación, que demostraron que las inyecciones repetidas de PGE1 en el pene aumentaban la cantidad de las enzimas productoras de óxido nítrico presentes en el mismo. «Como los inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5 como sildenafilo (Viagra), tadalafilo (Cialis) y vardenafilo (Levitra), actúan aumentando la eficacia del óxido nítrico para traer más sangre al pene (fenómeno que produce su erección), era lógico pensar que si en el humano operaba un mecanismo similar, las inyecciones repetidas de PGE1 deberían facilitar, potenciándola, la respuesta a los inhibidores de la fosfofiesterasa tipo 5 como, efectivamente, hemos demostrado con este estudio», señala el investigador.

El primer paso del estudio fue seleccionar los sujetos que se someterían al tratamiento, hasta llegar a 40 a quienes se puso una inyección con la dosis habitual de PGE1 cada dos semanas (20 microgramos). Además, se les daba indistintamente píldoras de Viagra o de un placebo para depurar los resultados. Los resultados publicados se obtuvieron tras ocho semanas de pruebas. Según indica Mas, quedan algunos detalles que aclarar, como por ejemplo, concretar las mejores dosis y periodicidad de las inyecciones, por lo que actualmente se está haciendo un seguimiento de los sujetos que participaron en el estudio.


Archivado en: Investigación, ULL