(31 de mayo 1641 – 3 de febrero de 1721)

Nació en San Cristóbal de La Laguna, hijo de Juan Núñez de la Peña, natural de Tenerife, y María Solís, natural de Córdoba. Estudió en el colegio de San Agustín de La Laguna y recibió órdenes menores en 1659. Ejerció de escribano público en Toledo, donde vivió durante cierto tiempo. La obra que marcó su trayectoria como historiador fue Conquista y antigüedades de las islas de la Gran Canaria y su descripción, con muchas advertencias de sus privilegios, conquistadores, pobladores y otras particularidades en la muy poderosa isla de Tenerife, dirigido a la milagrosa imagen de Nuestra Señora de Candelaria. Su aparición en 1676 constituye una referencia en la historiografía canaria. La preparación de esta obra lo llevó a investigar documentos municipales, notariales y eclesiásticos, de donde surge su interés por la genealogía del Archipiélago. Realizó, incluso, genealogías por encargo.

(27 de julio de 1850 – 2 de abril de 1916)

Considerado el padre de la Genealogía moderna en España, nació en Lanzarote y estudió durante varios años en el Seminario Conciliar de Canarias en Gran Canaria para ser sacerdote. Allí inició sus primeros contactos con la Genealogía, la Historia y la Heráldica, que fueron parte de su vocación posterior. Abandonó la formación religiosa para matricularse en la Escuela de Derecho anexa al Instituto de Segunda Enseñanza de Canarias en La Laguna, ciudad en la que habían fijado su residencia sus padres en 1866. Años más tarde también abandonó estos estudios para dedicarse al periodismo, a la política y a la investigación histórica. Entre 1878 y 1880, publicó en Santa Cruz de Tenerife los siete tomos de los que constaba el Nobiliario y Blasón de Canarias: Diccionario histórico, biográfico, genealógico y heráldico de la Provincia.
El 29 de junio de 1900 leyó en la Real Academia de la Historia su discurso de recepción pública titulado “La Genealogía y la Heráldica en la Historia”.

En la Biblioteca de la Universidad de La Laguna ocupan un lugar destacado los impresos publicados en Canarias y de autor o tema canario y entre ellas se encuentra un número importante de fuentes documentales de genealogía que comprenden fechas que van desde el siglo XVI hasta nuestros días.

Entre otras obras señalamos el Poema de Viana que incluye el árbol de la familia Guerra; los manuscritos de Juan Núñez de la Peña; la Descripción genealógica de las Casas de Mesa y Ponte de Antonio Ramos (1792); las numerosas aportaciones genealógicas de José Agustín Álvarez Rixo; la primera edición del Nobiliario y blasón de Canarias de Francisco Fernández de Béthencourt, la posterior revisión y actualización de Juan Régulo; la Historia de las casas de Machado y Monteverde en las Islas Canarias de José Peraza de Ayala o Casas y familias laguneras: los linajes y palacios de Nava-Grimón y Salazar de Frías de Alfonso Soriano.

La colección, además, incluye impresos de genealogía bíblica y estudios sobre los linajes de la realeza y la nobleza española y europea.

Puede señalarse que como resultado del proyecto presentado en 2024 a los Presupuestos Participativos de la ULL se ha incorporado a la plataforma Maresía, y puesto a disposición de la comunidad universitaria y la sociedad en general, la digitalización de una selección de documentos genealógicos correspondiente a cuatro archivos personales y familiares custodiados en el Fondo Antiguo y en la Biblioteca de Canarias: el Archivo de la Familia Lercaro-Justiniani, el Archivo personal de Dacio V. Darias Padrón (1880-1960), el Archivo personal de Francisco Montes de Oca García (1877-1964) y el Archivo personal de Rosendo García-Ramos y Bretillard (1835-1913).

Al abrigo de las Jornadas de Genealogía de Arona 2010 y 2011, el 2 de marzo de 2012 se constituye una asociación que aspira a aunar, preservar y difundir la investigación en Genealogía y Heráldica. Se llamará Sociedad de Estudios Genealógicos y Heráldicos de Canarias (SEGEHECA). Su presentación oficial tuvo lugar el 20 de abril del mismo año en el Centro Cultural de Los Cristianos, en Arona.

Este grupo comienza por estimular y dignificar el estudio de estas disciplinas mediante la aplicación de estrictos criterios científicos en el ámbito del archipiélago canario. Se apunta con rapidez a asociar genealogía la historia familiar, fundamentalmente para evitar la tan traída y llevada mala prensa que el término había tenido en siglos pasados. Y empiezan a desarrollarse historias familiares paralelas entre descendientes de canarios que emigraron: los nexos genealógicos con personas y países del otro lado del océano Atlántico no han hecho más que crecer, porque cualquier corriente emigratoria no tiene las mismas características ni motivaciones, pero siempre ratifica el asentamiento y la formación de nuevas familias. En la actualidad, los descendientes de canarios que se establecieron en los antiguos países receptores de inmigración generan miles de búsquedas genealógicas cada año en Canarias, de las que es testigo la SEGEHECA.

De este modo, cada año, la SEGEHECA ha tenido un referente, las Jornadas de Genealogía de Arona, en la actualidad Jornadas de Genealogía de Canarias, pero, además, ha celebrado el I y II Congreso Internacional de Genealogía e Historia familiar de Canarias y la XXII Reunión Americana de Genealogía y el XII Congreso Iberoamericano de las Ciencias Genealógica y Heráldica, lo que supone un importante reconocimiento al buen hacer de su organización.

Por primera vez, gracias a las investigaciones y publicaciones que desarrolla la SEGEHECA, en la genealogía de las islas Canarias interesa lo mismo la historia familiar de una persona anónima, la del indígena guanche o la de un noble. La fusión de culturas que vivieron las islas en su repoblamiento tras la conquista es la imagen viva que pretende difundir esta asociación.