El Consejo Social de la Universidad de La Laguna aprobó ayer lunes 3 de marzo el presupuesto de la institución académica para 2008, que se eleva a 156 millones de euros y fue ya refrendado por el Consejo de Gobierno a mediados del pasado mes de enero. La aprobación por parte de este órgano colegiado, por un total de 18 votos a favor, uno en contra y una abstención, supone la ratificación definitiva del documento que regirá el estado de ingresos y gastos en el presente ejercicio.
El presidente del Consejo Social, José Miguel González, explicó que con la entrada en vigor este año de la Ley de Hacienda Pública Canaria, que considera a las universidades como entes públicos con presupuesto limitativo, los presupuestos de instituciones de educación superior deben introducir una serie de modificaciones en su presentación. Dado que se trata de un documento que viene gestándose desde finales del año pasado, se entiende que será el próximo ejercicio cuando se adapte definitivamente al nuevo formato, por lo que González calificó este año como de «transición».
Con todo, el Consejo Social acordó introducir en las bases de ejecución del presupuesto de 2008 la salvedad de que de producirse déficit, este deberá ser eliminado, y añadió además en una disposición adicional que el contenido del presupuesto habrá de adaptarse a la nueva ley.
Una representante del sector del alumnado presentó una enmienda que abogaba por aumentar las ayudas sociales a este colectivo, y que fue desestimada por el pleno al no incorporar la consiguiente partida que se debería detraer del presupuesto con el objeto de que quedara finalmente equilibrado los gastos y los ingresos.
Por su parte, el rector, Eduardo Doménech, explicó de nuevo que la universidad no ha recortado las ayudas de carácter asistencial al alumnado, sino que simplemente las ha adaptado a la demanda existente, puesto que se ha observado en los últimos presupuestos que año tras año no se gasta ni el 50% de las ayudas inicialmente contempladas en el documento.
En cuanto a las tasas académicas, Doménech añadió que la Universidad de La Laguna no tiene potestad para fijarlas, al tratarse de una competencia de la comunidad autónoma en virtud de unos parámetros de mínimos y máximos que establece el propio Ministerio de Educación. En cualquier caso, precisó, el incremento de este año es un punto inferior al del año pasado, al tiempo que señaló que Canarias cuenta con unas de las tasas académicas más bajas del país.
El órgano colegiado dio asimismo su visto bueno a la construcción de la segunda fase de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Informática, ubicada en el campus de Anchieta, y a la cesión de uso a la Fundación Empresa Universidad de una superficie situada en el edificio anexo a la antigua Torre de Química con el objeto de concentrar sus servicios en un espacio común.

