Muchos estudiantes compaginan su formación universitaria con la práctica deportiva de alto nivel, lo cual puede comprometer en muchas ocasiones su rendimiento académico. Para hacer frente a esta situación, universidades como la Complutense de Madrid, la Autónoma de Barcelona, La Coruña o Jaén, vienen desarrollando programas para facilitar que se pueda compartir la actividad competitiva y la formativa. Desde este curso, la Universidad de La Laguna también ha iniciado la implantación de un sistema de tutorías personalizadas para atender las necesidades de este alumnado especial.
Este programa innovador dirigido a estudiantes deportistas de alto nivel se denomina Sistema de Tutorías Personalizadas para Deportistas de Alto Nivel (TUDAN) y cuenta con el apoyo del Vicerrectorado de Calidad Docente e Innovación Educativa de la ULL; el Vicerrectorado de Servicios Universitarios, al que pertenece el Servicio de Deportes de la ULL; y el Consejo Superior de Deportes.
Participan en él profesores tutores de diez facultades de la ULL: Farmacia, Ingeniería en Edificación, Derecho, Maestro en Educación Física, Náutica y Transporte Marítimo, Medicina, Ciencias Empresariales, Psicología, Económicas y Administración y Gestión de Empresas, donde cursan sus estudios alumnado que practica deporte de alta competición.
Entre ellos, cabe destacar a deportistas de reconocido prestigio nacional como Simón Siverio, campeón de España de salto de altura e integrante de la selección nacional; Yasmina Hernández, campeona de la Superliga Femenina de voleibol e integrante del equipo nacional con más de 80 partidos internacionales; o María Medina, campeona de España Sub 22 y jugadora de la selección absoluta de frontenis.
El proyecto TUDAN, coordinado por el profesor de la Facultad de Educación Pedro Álvarez Pérez, tiene como objetivo principal ayudar al alumnado a armonizar la actividad deportiva con la actividad académica, facilitando el acceso a los estudios, la organización del proceso de aprendizaje a través de un seguimiento tutorial personalizado y la planificación de un proyecto profesional y vital que le sirva de guía a lo largo de sus estudios y de cara al futuro.
El programa de tutorías recoge actividades como “Mapa del curso, periodos críticos y plan de trabajo”; “Ayudas y servicios de apoyo a los estudiantes deportistas”; “Valoración de la marcha del curso y preparación de la evaluación”; “Organización y planificación del estudio”; “Proyecto profesional y vital”; “Resultados formativos y planes de mejora”.
Pedro Álvarez valora los primeros pasos de esta iniciativa: “Hemos encontrado no sólo una enorme implicación por parte de los profesores tutores para llevar a cabo un seguimiento personalizado del proceso de aprendizaje de los deportistas de élite, sino también por parte de los propios estudiantes tutelados, que desde el momento en que han conocido la existencia del programa han mostrado su satisfacción al sentirse respaldados y apoyados para encontrar soluciones a los problemas que derivan de la compaginación de estas dos actividades”.
La tutoría universitaria es una de las medidas académicas importantes para hacer frente a las dificultades de estos estudiantes y dar respuestas a sus necesidades específicas, por lo que el tutor desempeña un papel fundamental mediando en la resolución de dificultades.
“El programa no busca solamente corregir desajustes puntuales, sino que incide en la vertiente formativa de la tutoría, que en este caso nos parece fundamental para ayudar a estos alumnos a estructurar y compatibilizar su calendario académico con su calendario deportivo. Asimismo, entendemos que la tutoría puede compensar algunas de las lagunas que en el proceso formativo genera la práctica deportiva y que el tutor puede potenciar mediante el oportuno asesoramiento”, explica Álvarez.
Una de las tareas específicas del tutor es la mediación ante el profesorado del deportista, con el fin de encontrar soluciones a las dificultades que ocasiona la alta competición. Más concretamente, supone negociar alternativas para resolver la imposibilidad de asistir a exámenes, clases teóricas y prácticas y la necesidad de introducir algún tipo de apoyo académico personalizado, como actividades de refuerzo, resolución de dudas a través de medios virtuales, tutoriales de apoyo para seguir la materia, etc.
Según el experto, uno de los problemas más frecuentes suele presentarse coincidiendo con las convocatorias de exámenes, a las que en muchas ocasiones los estudiantes deportistas no pueden acudir debido a concentraciones o competiciones. “Al respecto, y en la línea de lo que recoge el Estatuto del Estudiante, cabe señalar que la ULL está a punto de aprobar una normativa en la que se reconoce el derecho del alumnado deportista a que se tenga en cuenta su situación y se busquen soluciones constructivas para hacer compatible la práctica deportiva y la formativa”.

