El equipo decanal de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación, encabezado por José Antonio Batista Medina, repite mandato en el centro, de tal forma que todos sus componentes renuevan en el cargo. El propósito de Batista y sus vicedecanos es reforzar la idea de comunidad, entendiendo que se trata de un solo centro con dos ubicaciones y varias titulaciones, al tiempo que apostar por la formulación de nuevos grados y dobles grados.
Así, las personas que estarán seis años al frente del centro son Milena Trenta, como secretaria; José Manuel Díaz González, vicedecano de Ordenación Académica y Coordinación Docente; Aníbal Mesa López, vidececano de Calidad de las titulaciones de Antropología Social y Cultural y de Sociología; Samuel Toledano Buendía, vicedecano de Calidad de las titulaciones de Periodismo y de Trabajo Social; Patricia Adriana Delponti Maccione, vicedecana de Movilidad y Relaciones Institucionales; y Rosa Elena Rapp Luz, vicedecana de Alumnado, Igualdad y Comunicación.
En este centro se imparten los grados de Sociología, Trabajo Social, Periodismo, Antropología Social y Cultural y el doble grado en Sociología y en Antropología Social y Cultural. En cuanto al posgrado, la facultad acoge el Máster Universitario en Innovación Comunicativa en las Organizaciones y el Máster en Intervención y Mediación Familiar, Social y Comunitaria.
El equipo de gobierno del centro se propone ahora consolidar los títulos existentes, al tiempo que flexibilizar el catálogo de títulos para hacerlos más atractivos con modalidades híbridas de presencialidad. De hecho, ya se ha creado una comisión de trabajo que está estudiando nuevas propuestas en este ámbito.
La consecución de despachos y otros espacios de atención al alumnado, la continua mejora de las aulas y el reforzamiento de la proyección externa de la facultad también figuran en los objetivos del equipo encabezado por Batista Medina.
El decano agradeció en el acto de toma de posesión la buena disponibilidad de todo el equipo, lo que le ha valido para presentarse nuevamente al cargo. Por su parte, el rector, Francisco García, también tuvo palabras de agradecimiento para todo el decanato, sabedor de que la dedicación a la gestión pública ralentiza en cierta medida la proyección investigadora. También recordó que en el propio juramento del cargo se hace referencia a la capacidad de autogobierno que tiene la universidad, lo que implica una alta responsabilidad en la rendición de cuentas a la sociedad, pero también un genuino poder para defender los valores de la universidad pública, “que en estos tiempos son más necesarios que nunca”, precisó. Con todo, el rector añadió que hay que ser autocríticos con nuestra propia gestión y apostar por la innovación y el cambio.


