ElFestiviWonder es una nueva iniciativa de entretenimiento centrada en la cultura retro que iniciará su andadura mañana, jueves 30 de octubre a las 19:30 horas en el Paraninfo de la Universidad de La Laguna, con una sesión especial de Halloween titulada “Jawsploitation”. Esta sesión está centrada en dos películas italianas concebidas para explotar con poco pudor el éxito de “Tiburón” (1975, llamada “Jaws” originalmente). En concreto, se proyectará “Piraña II: Los vampiros del mar” (1982) y “Jaws 5”, también conocida como “Cruel Jaws” (1995). Las entradas están disponibles a 10 euros en la plataforma Ecoentradas.
Organizado con la colaboración del festival CutreCon, esta velada propone pasar un rato divertido con dos películas que, aunque originalmente fueron planteadas con visos de seriedad, su dudosa calidad asegura las risas y el disfrute que solo el cine involuntariamente malo puede producir, ideal para una fiesta que une horror y diversión como Halloween. En este caso se tributa la tradición italiana de producir con pocos escrúpulos y menor presupuesto películas inspiradas en éxitos de Hollywood como, en este caso, el clásico de Steven Spielberg.
“Piraña II: Los vampiros del mar” supuso el debut de James Cameron, episodio de su vida que evita recordar para centrarse en éxitos como “Titanic” y “Avatar”. El entonces joven director estadounidense se vio envuelto en esta producción italiana de la que finalmente sería despedido a las pocas semanas de rodaje, pero por razones contractuales su nombre siguió vinculado a la cinta. La historia comienza en un resort tropical cercano a un complejo militar secreto que ha creado pirañas genéticamente modificadas que además de nadar, vuelan y atacan desde el aire.
“Jaws 5” o “Cruel Jaws” está dirigida por el especialista en este tipo de cintas Bruno Mattei. En este caso, un pueblo costero es acosado por un tiburón blanco mutante que ataca a los bañistas y tendrá que ser detenido por el comisario del pueblo, un experto en escualos y el dueño del parque de atracciones local. Lo que hace “especial” a esta cinta es que, directamente, roba escenas de otras películas de tiburones, ya sean de la propia serie oficial como de otras explotaciones, dando lugar a un Frankenstein marino hecho de retazos de otras películas

