La profesora Viridiana Contreras Villarreal, especialista en producción agropecuaria de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (México) ha realizado una visita de una semana a la Universidad de La Laguna en calidad de profesora invitada por el catedrático de Ecología José Ramón Arévalo para afianzar la relación académica establecida gracias a la firma de un convenio entre ambas instituciones vigente desde 2015. Fruto de esta colaboración, ambos docentes co-tutorizarán la tesis de una alumna de la institución mexicana, que de este modo obtendría su doctorado en las dos universidades.
La doctoranda en concreto es Jeanette Jiménez y, aunque todavía se están discutiendo los detalles sobre la temática final de la tesis, es muy probable que aborde el comportamiento del pastoreo en áreas tanto de las Islas Canarias como de las áreas áridas de México. “Falta afinar algunos detalles, pero sería conjuntar de alguna forma lo que ella conoce, que es el comportamiento de pequeños rumiantes, con algo de ecología y el impacto de los animales y su pastoreo en las diferentes áreas vegetativas”, explica Viridiana Contreras.
Por su parte, Arévalo explica que él ya ha participado como asesor en otras tesis doctorales de la universidad mexicana, pero esta será la primera ocasión en que se involucre en la dirección de una, y también será la primera co-tutoría entre las dos instituciones. Explica que la relación entra ambas entidades surge cuando él hacía una estancia en California donde coincidió con el investigador mexicano Miguel Mellado e iniciaron una colaboración que se plasmó en el convenio y, de manera más práctica, en más de 17 artículos en revistas científicas de impacto.
La investigadora visitante explica que ha plasmado su especialización en producción agropecuaria en líneas de investigación sobre la jerarquía en pequeños rumiantes y su reproducción. Por su parte, Arévalo es especialista en ecología, y la investigación de Contreras entronca con la suya dado que uno de los aspectos analizados en la dieta de esos animales su impacto en las comunidades pastizales del norte de México.
Viridiana Contreras señala que puede haber similitudes entre los ecosistemas de Canarias y México porque puede darse la existencia de zonas áridas o semiáridas donde hay una falta de agua. “Tenemos algunas cosas en común, pero lo interesante sería ver cómo los comportamientos y cómo el pastoreo en diferentes áreas ecológicas puede ser similar o diferente”. Arévalo matiza que una diferencia fundamental es que en Canarias no hay herbívoros vertebrados de forma nativa, mientras que en México sí se dan la herbivoría natural, con animales salvajes.
“Nosotros consideramos, desde el punto de vista del mantenimiento del ecosistema, que el pastoreo y la ganadería extensivos en Canarias es sostenible siempre y cuando esté bajo unos mínimos requerimientos de control del ganado”, explica Arévalo, que reconoce que es una actividad que genera algunas críticas por su impacto. “Pero también es verdad que es una actividad muy interesante. La producción de leche para queso, con los quesos tan apreciados que tenemos en Canarios, la única manera de mantenerla es, en cierto modo, mantener esta actividad de manera sostenible”.
El experto recuerda que Canarias es una zona libre de brucelosis, con lo cual se puede utilizar la leche de forma cruda. “Esto da unas características organolépticas a los quesos que son muy apreciadas. Además, es una de las pocas cosas del sector primario donde casi podemos decir que los números salen. Por eso yo creo que dedicar una porción del territorio a una actividad tan característica y que durante tantos siglos se ha mantenido en Canarias, es interesante estudiar si es posible seguir con este mantenimiento”.
Hablando también de la situación del pastoreo en México, en el municipoo de Saltillo, donde se ubica la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, existen rebaños de cabras (o chivos, como se llama allí a esos animales), a las que se permite acceder a zonas de cultico que ya no están en explotación y también en las áreas de semidesierto. Ahí pueden darse las similitudes con Canarias, si bien cierto ahí lo que es predominante es el ganado de vacas lecheras, aunque no sea un área idónea para ellas. “Entonces, sería más interesantes que la región, que tiene poca agua, maneje más cabras que ganado vacuno”, explica Contreras.
Al margen de estos estudios sobre la relación entre fauna y pastos, la experta mexicana también se ha reunido con otros investigadores de la Universidad de La Laguna para estudiar posibles vías de colaboración científica, así como con estudiantes con vistas a posibles intercambios. “Nosotros tenemos actualmente 92 alumnos de posgrado. Entonces, podemos enviar a algunos aquí y también recibirlos, tanto si son de maestría como si son de doctorado, allá tenemos ambos programas”.
Ambos profesores han visitado ya sus respectivas universidades y aprecian que existe una verdadera cercanía entre los dos países. “En el momento que vas a México, tienes una sensación familiar”, explica Arévalo. Por su parte, Contreras apunta una curiosa coincidencia: “La Universidad Antonio Narro está ubicada en la ciudad de Torreón Coahuila, a la que, curiosamente, también se la conoce como La Laguna. ¡Así que he venido de La Laguna a La Laguna!”.

